El término "extraball" se usa a menudo en el mundo del escorting y la prostitución. Simplemente significa que el cliente puede volver a hacerlo después de eyacular y, por lo tanto, tener múltiples orgasmos en la misma cita. La palabra proviene de la bola extra que se otorga en una partida de pinball.
A veces se usa la abreviatura inglesa MSOG, que significa "Multiple Shot On Goal".
Como suele ocurrir en este entorno, todos lo quieren y creen que lo necesitan. Sin embargo, según las chicas, es más una petición que una realidad. Aunque muchos hombres se preocupan por la posibilidad de tener un extraball, en la mayoría de los casos no lo usan y el tiempo restante se emplea en socializar, recibir un masaje o simplemente no se usa.
Los clientes más interesados en esta opción son los eyaculadores precoces, los principiantes entusiastas y aquellos que buscan aprovechar al máximo su inversión. También puede tratarse de alguien motivado por lograr un rendimiento sexual que quizás no sea del gusto de su pareja oficial.
Lo que es seguro es que, en una cita de una hora, los hombres capaces de repetir son muy pocos, aunque muchos se preocupen por ello. Saber que el extraball es una posibilidad suele tranquilizar a los clientes.
Esta práctica no es aceptada por todas las chicas por diversas razones. En el caso de las prostitutas callejeras, no es algo habitual. Su trabajo consiste más en satisfacer un deseo rápido. Se esfuerzan por hacer que todo sea veloz y, por lo general, no quieren repetir. Consideran que, si ha habido una relación sexual, ya han hecho su trabajo.
Las chicas que trabajan en salones suelen estar en la misma situación. Aunque se les paga por un periodo más largo, no siempre están dispuestas a conceder una segunda ronda, a menos que quede mucho tiempo disponible.
Las escorts de alto nivel lo permiten naturalmente si la cita es para varias horas. Sin embargo, en una cita de solo una hora, suponiendo que acepten encuentros tan cortos, no les gusta ser utilizadas únicamente para sexo durante toda la sesión. Prefieren conversar y establecer una relación más cercana, que pueda llevar a una cita más larga en el futuro.
Por un lado, ayuda a tranquilizarse como hombre, pero también tiene otra ventaja. Si la escort lo acepta, suele estar menos apresurada y considera que puedes disfrutar del tiempo que has reservado. A veces es útil preguntarlo, ya que permite conocer la visión que la chica tiene de su trabajo.
La práctica del coito múltiple no es algo común. Si quieres asegurarte de que tu escort lo acepta, es recomendable consultarlo con ella de antemano.
Si el término te parece demasiado directo, ya que está muy vinculado al mundo de la prostitución, puedes abordar el tema de otra manera.
En cualquier caso, no tiene sentido pedirlo si has reservado menos de una hora o si has encontrado a una chica en la calle.